Pásate a la cosmética bio

¿Cansada de cremas o maquillajes que te producen alergias? ¿Harta de productos que prometen milagros pero que dejan tu piel incómoda y sensibilizada? ¿O simplemente quieres algo más respetuoso con el medio ambiente,  que contamine menos, que utilice menos químicos?  Si es así, este es el momento de que pruebes la nueva alternativa a la cosmética tradicional para el tu cuidado y el de toda tu familia.

Cosmética natural, ecológica y bio

Productos cosmetica natural:una tendencia que gana más adeptos cada día tanto entre los especialistas en belleza como entre el público en general.

¿Por qué se está volviendo tan popular la cosmética ecológica? Además de por una mayor sensibilidad ante la necesidad de proteger el medio ambiente y los recursos naturales,  la razón principal para este auge de la cosmética bio es un motivo de salud.

La piel es el mayor órgano del cuerpo; n o es simplemente una barrera que nos aísla del exterior, sino que permite el paso de activos a nuestra sangre.  Cuando nos aplicamos productos de cosmética “comercial”,  estamos depositando sobre nuestro cuerpo miles de componentes químicos  que pueden incluso cambiar nuestro equilibrio hormonal.  Es el caso de los parabenos, que son capaces de atravesar la barrera de la piel y volver loco a nuestro sistema endocrino.

¿Qué es cosmética bio?

Para poder llevar la etiqueta Eco, un cosmético tiene que cumplir una serie de requisitos entre los que se encuentra no llevar en su formulación parafinas, vaselina, aceite sintéticos derivados del petróleo o productos de origen animal: pueden usarse materias primas obtenidas del animal vivo, como leche, miel o polen pero no grasas animales o similares. También han de estar libres de colorantes sintéticos o perfumes artificiales.

Cremas, geles y champús sin parabenos ni siliconas; envases hechos de vidrio, de plástico libre de BPA, de cartón reciclado o procedente de bosques sostenibles;  embalajes pensados de forma racional sin añadir capas y más capas de relleno totalmente innecesario y en muchas ocasiones altamente contaminante;  ingredientes de producción ecológica, libres de pesticidas o antibióticos, obtenidos a través de comercio justo;  marcas que elaboran sus productos reduciendo sus emisiones de gases, con energía obtenida de fuentes renovables.  Esto es la nueva cosmética natural.