La ría de Vigo, al sur de Pontevedra, es una de las rías gallegas con mayor empuje en el sector del ecoturismo. Su biodiversidad, oferta de actividades sostenibles y variedad de parques y espacios verdes la convierten en un destino soñado para los entusiastas del turismo activo. En particular, el público senderista dispone de multitud de rutas senderismo islas cies, las Salinas de Ulló y otros enclaves naturales.
Una muestra de la calidad de las rutas de trekking en Vigo es la senda «Entre Faros», un recorrido de tres kilómetros y medio que discurre por Monteagudo, Faro y San Martiño, islas que conforman el archipiélago de las Cíes. Cuenta con senderos bien señalizados, casetas informativas y servicios orientados para los senderistas. Por si fuera poco, la ría más meridional de las Rías Baixas alberga otras rutas de interés en Donón, Redondela, Vilaboa, etcétera.
Además, la infraestructura náutica de la ría de Vigo es de primera categoría. Por eso aquí se han celebrado competiciones como la 52 Super Series y The Ocean Race. Para el viajero con inquietudes marineras, los clubes y puertos deportivos permiten alquilar embarcaciones pequeñas y medianas, además de ofrecer cursos y travesías a precios competitivos.
A bordo de un kayak o sobre una tabla de paddle surf, esta ría de treinta kilómetros aprox. de longitud tiene mucho que ofrecer. Los turistas más jóvenes son libres de navegar por las islas de Toralla y San Simón, así como las playas de Bouzas, Samil, Vao o Rodeira y otros parajes costeros, si bien deben cuidarse de no desembarcar en las Cíes sin autorización.
Así pues, la ría de Vigo es un escenario privilegiado para el turismo de naturaleza. En los meses de primavera y de verano, presenta un atractivo superior, por el mayor número de horas de sol que ofrece.