5 de cada 10 españoles padece algún tipo de alopecia, y en el 90% de los casos se identifica con la androgénica, es decir, está causada por antecedentes familiares. Sin embargo, estos no son el único motivo: el estrés emocional, las alteraciones hormonales, la mala alimentación y determinados tratamientos capilares (tintes, por ejemplo) pueden estar detrás de la caída del cabello.
Justo es reconocer que la genética es el principal inductor de la calvicie mundial, como afirmaría cualquier dermatologo especialista en alopecia. Se estima que el cromosoma X y su vinculación con el gen receptor de andrógenos o hAR es la causa de este problema, heredado en realidad de la madre y no de padre. Teóricamente, si el padre y el abuelo de aquella desarrollaron calvicie, sus descendientes son susceptibles a sufrir esta anomalía.
Además, la testosterona puede desempeñar un rol protagonista en la calvicie. Aunque se desconoce a ciencia exacta, la dihidrotestosterona o DHT —un andrógeno tres veces más potente que la testosterona que la citada hormona esteroidea sexual— influye negativamente en el crecimiento capilar.
De todos los tipos de alopecia, tres de ellas se originan en factores genéticos. La más común es la calvicie androgenética, caracterizada por el empequeñecimiento del folículo piloso y el debilitamiento del cuero cabelludo. La acción directa de la hormona DHT y la enzima 5-alfa-reductasa son sus responsables.
La alopecia areata, por su parte, ocasiona la pérdida de cabello en áreas específicas, dando como resultado un pelo de densidad irregular y parcheado. Alrededor del 2% de la población está en riesgo de sufrir esta clase de calvicie, de acuerdo con la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
Por último, la alopecia universal es la manifestación más severa de esta afección, pues conlleva la pérdida de fibra capilar no sólo de la cabeza, sino también de las cejas, las pestañas y el resto del cuerpo. Aunque las complicaciones del sistema endocrino, las alergias y los problemas psicológicos pueden ocasionarla, la existencia de antecedente familiares es la causa más probable.