Ya tengo el carnet y ahora, ¿qué?

Si acabas de obtener tu carnet de conducir seguro que te sientes un poco perdido o perdida, especialmente si lo has conseguido a una edad avanzada. ¿Qué hago ahora? ¿Debo de comprar un coche o debo de esperar? El consejo que te dará cualquier persona que lleva tiempo conduciendo es que, si puedes hacerlo, compres un vehículo inmediatamente.

En la autoescuela aprendes cómo aprobar el carnet de conducir pero a conducir realmente aprendes en el día a día. Eso sí, lo más apropiado es buscar coches de segunda mano coruña ya que para personas novatas en la conducción suelen ser los más adecuados por muchos motivos:

-Seguramente salgas de la autoescuela con malas costumbres. En la autoescuela suelen asegurarse de que el vehículo no se te cale durante el examen enseñándote a conducir abusando del embrague, especialmente cuando uno se detiene ante un semáforo.

En estos casos es probable que hasta que pierdas esa mala costumbre estés haciendo que el embrague de tu coche se gaste en exceso. Si tiene que fallar, que sea el de un vehículo de segunda mano ya que seguramente cualquier arreglo sea mucho más económico que en uno nuevo.

Al igual que ocurre con el embrague ocurre con otros detalles de la conducción, como la forma de acelerar. Aunque los extras de un vehículo pueden darle seguridad y estabilidad, lo mejor es comprar uno sencillo para empezar, ya que de otro modo el conductor puede sentirse sobrepasado. Por ese mismo motivo se desaconsejan los vehículos con ordenador a bordo porque pueden acabar suponiendo una distracción en lugar de una ayuda.

-El aspecto psicológico también influye. Para muchas personas que aprenden a conducir ya mayores conducir un vehículo nuevo es una presión añadida. Tienen tanto miedo a arañarlo o a tener un golpe que acaban bloqueándose y en muchos casos acaban por no conducir. Un vehículo de segunda mano siempre se ve de otra manera.

Evidentemente, nadie quiere golpear su coche, pero no es lo mismo que suceda con uno nuevo de paquete que con un vehículo que, aunque nuevo para nosotros, no tiene el mismo valor.

Conducir un coche de segunda mano hace que muchas personas se sientan más relajadas y más tranquilas. Más adelante, cuando tengan seguridad en el volante, podrán optar por comprar un coche nuevo o por comprar uno de segunda mano más actual y con más prestaciones.