¿Cuáles son las mejores ideas para decorar dormitorios juveniles?

En la decoración de dormitorios juveniles intervienen grandes dosis de creatividad y pragmatismo. Estas habitaciones, a diferencia de un salón o un recibidor, reciben un amplio número de usos, haciendo las veces de estudio, biblioteca, sala de ocio, etcétera. Para colmo de males, los dormitorios pueden ser el ‘hábitat’ de 2-3 personas de edades y aficiones distintas, circunstancia que convierte el trabajo del decorador en un desafío.

 

Combinar la iluminación natural y la artificial es clave en la decoración de dormitorios para adolescentes. En primer lugar, se debe regular la intensidad de los rayos solares con ayuda de una cortina o estor juvenil, que además proporciona esa privacidad que jóvenes y adultos necesitan. Respecto a la luz artificial, es importante combinar sabiamente los distintos focos lumínicos (lámparas de escritorio, de mesita de noche, etcétera) para conseguir una iluminación uniforme y fácilmente adaptable a las necesidades que exija cada actividad.

 

El diseño de paredes y techos determinará en gran medida el estilo del dormitorio. Aunque cada adolescente tendrá sus propios gustos, se recomienda utilizar colores vivos y alegres, colores que despierten emociones positivas y aporten un toque de frescura al mobiliario. Tampoco es preciso utilizar un amarillo fluorescente. El rosa pálido, el verde agua y otros tonos pastel son una solución idónea para conseguir estos objetivos, sin convertir la habitación en un tiovivo de feria.

 

Como alternativa, los vinilos y murales decorativos ayudan a conseguir efectos sorprendentes, amén de preservar la pared de la pega de pósters de cine, música y vídeojuegos (las tiras de celo suelen deteriorar el papel y la pintura).

 

Por otra parte, la juventud valora los armarios abiertos, esos que no tienen nada que esconder. La ausencia de puertas maximiza el espacio, pues incluso las correderas deben coordinarse para acceder a objetos que, con los armarios abiertos, serían accesibles estirando la mano, así de simple.